Perdida de peso. Consideraciones clave para lograr el éxito

  • Publicado:
  • 01/10/2015

Si bien existen algunos factores genéticos que pueden contribuir al desarrollo de trastornos del peso y enfermedades relacionadas como la obesidad, al parecer los expertos afirman que el factor clave se debe a la consecuencia de los estilos de vida que presentan actualmente las sociedades occidentales. El predominio de la cultura del sedentarismo y la pérdida gradual de actividades físicas, llegan al extremo en que tanto el hombre como la mujer de hoy solamente gastan el 20% de las calorías que demandaban a nuestros abuelos hacer las mismas tareas.

Paralelamente, la distorsión alimentaria llevada a cabo por la industrialización de los alimentos, con su consecuente “vaciamiento” nutricional sólo conduce a incrementar el desbalance orgánico corporal trayendo aparejado carencias nutricionales. Parece innecesario afirmar que, junto al alimento en sí, se consume además una multitud de sustancias sintéticas peligrosas –inclusive tóxicas– tales como: conservantes, colorantes artificiales, emulsionantes, turbidizantes, espesantes, estabilizadores de color, odorizantes, saborizantes, etc., lejos del verdadero placer que brinda la Naturaleza al ofrecer su vasto concierto de olores, colores y sabores de las cosas frescas y naturales. 

En el mercado se presentan una inmensidad de productos enfocados a la pérdida de peso, que abarcan distintos modelos de tratamientos incluyendo quemadores de grasas, saciadores del apetito, conllevando algunos a peligrosos trastornos metabólicos asociados y a innumerables efectos adversos como la pérdida y debilitamiento de la masa muscular, estados depresivos y efectos del tipo rebote al momento de suprimir su uso, entre otros.

Sin tener en cuenta la selección del producto a consumir –factor no menos importante–, como regla general debe considerarse que la efectividad del proceso de pérdida de peso, solo será á eficaz si la ingesta de cualquier producto es el complemento y no sustituto de una dieta adecuada y el establecimiento de un programa motriz de ejercitación paralela.

Existen dos parámetros básicos a tener en cuenta para mejorar la efectividad en la reducción del peso corporal:

Regulación de calorías

Un gran error que suele cometerse es dejar de comer o alimentarse insuficientemente para disminuir el peso. Cuando el cuerpo percibe la restricción en la ingesta de nutrientes, se desarrollan automáticamente ciertos mecanismos orgánicos que tienen como objetivo acumular energía en tejidos de reservo como las grasas. Éste proceso, heredado de los primitivo seres humanos cazadores, es la circunstancia por la cual muchas dietas fracasan ya que no cubren la ingesta adecuada de nutrientes para el organismo. Una forma de regulación del metabolismo es aumentar el número de comidas diaria, o repartir la ingesta de alimentos claves en las comidas principales siendo preferibles los hidratos de carbono y las fibras durante la mañana y mediodía; y una dieta más abundante en proteínas a la noche.

Regulación de la sed

Por lo general, gran parte de la ansiedad por el consumo de alimentos que puede sufrir una persona tiene en realidad una importante componente de sed. Para suprimir esta sensación es muy recomendado que la persona aumente el consumo de líquidos o simplemente agua. De esta manera en el momento tener hambre, al beber uno o dos vasos de agua, logrará modular en cierta medida su ansiedad.

También puede recurrir a consumir frutas como la pera, kiwi o manzana, de gran concentración de agua que le ayudarán a saciar su hambre y mantendrán el metabolismo activo continuamente.

LIC. ERIC G. STREMBEL
Hydro-Grow® Laboratorios
Licenciado en Química. Especialista en Plantas Medicinales.
Departamento científico Hydro-Grow® Laboratorios

REFERENCIAS

  • Kokk, F., Bouwman, L., Desiere, F. Personalized Nutrition. Principles and Applications. CRC Press 2008.
  • Bendich, A., Deckelbaum, R.J. Preventive Nutrition. The Comprehensive Guide for Health Professionals. Second Edition. Humana 2001.
  • Li, T.S.C. Vegetables and Fruits. CRC Press 2008.
  • Ministerio de Sanidad y Consumo. Gobierno de España. Guía de Práctica Clínica sobre Trastornos de la Conducta Alimentaria. 2010.
  • Miller, G.D., Jarvis, J.K., McBean, L.D. Handbook of Diary Foods and Nutrition. National Dairy Council®. CRC Press 2000.